Algo extraordinario, que estaba creciendo, está en peligro.

Nunca antes en democracia habíamos tenido tanta gente defendiendo - sin complejos - nuestras ideas en el Congreso, en los parlamentos regionales, en los ayuntamientos, dispuestos a plantarle cara a las siniestras ideas de la izquierda.

Santiago Abascal y los suyos han dado una batalla en las peores circunstancias que en muchos momentos nos ha ilusionado, nos ha hecho pensar que el cambio es posible. Pero ahora mismo hay un peligro: la presión de los poderes mediáticos del establishment quieren destruir su espíritu original obligándole a ceder y a rebajar el discurso que sedujo a millones de españoles.

Ante esta arremetida, Abascal no puede dar un paso atrás, tiene que aguantar el tipo por todos aquellos que pensamos que en España otra política es posible. Ayudemos a Santiago Abascal y a su equipo a mantenerse firme en sus principios, pidámosles que no cedan a la presión ni desfallezcan en la batalla por los valores.

En HO no tenemos vínculos con ningún partido ni con ningún político, ya lo sabes.

Siempre nos hemos mantenido firmes y no pedimos disculpas por defender la vida, la familia, la dignidad de España y las libertades... Siempre hemos luchado con uñas y dientes contra de las fuerzas del aborto, el lobby radical LGTBI y la ideología de género.

Por eso, cuando un partido ignora nuestros valores, lo criticamos. Y cuando un partido se mantiene firme y da la cara por los mismos valores que defendemos, lo aplaudimos. Hoy día, después de las elecciones, parece que solo Santiago Abascal está dispuesto a ser esa voz (con claridad), y tiene la clave para formar gobiernos en muchos lugares de España, incluido Madrid.

Pero ahora, a Santiago Abascal y a los representantes de VOX se les dice que deben callarse, abandonar su firmeza y seguir las políticas de izquierda del partido anterior. ¿Qué pasará si hace eso? Que nadie se opondrá a la izquierda en el aborto, en el adoctrinamiento LGTBI y en la ideología de género.

Si hace eso, traicionará a los ciudadanos que ven en VOX la esperanza de algo mejor.  Por eso debemos pedirle que se mantenga firme.

Que se mantenga firme frente al aborto, contra el adoctrinamiento LGTBI de los niños en la escuela, por la libertad de los padres de educar a sus hijos, por las libertades de los ciudadanos a quienes las leyes ideológicas de la izquierda esclavizan.

Solo ha pasado una semana de las elecciones y ya hay medios del establishment, medios con intereses empresariales (a izquierda y a derecha) pidiendo Santiago Abascal y a los suyos que se olviden de lo prometido a sus votantes en campaña y de su programa electoral, porque lo único que les importa es que faciliten la gobernabilidad junto a PP y C’s, no la defensa de sus principios y valores.

Abascal ha dicho siempre que es un hombre de principios. Y ha prometido que no se doblegará y que no va a decepcionarnos… Pero los poderes mediáticos son tan fuertes que amenazan con destruirlo si no se aviene a rebajar su discurso y apoyar cualquier cosa que le pongan delante.

Sobre todo quieren que se olvide de la defensa de la vida, que renuncie a denunciar las leyes ‘mordaza’ LGTBI y de género y el adoctrinamiento sexual de nuestros hijos en las aulas. Y no pararán de presionarle hasta conseguirlo.

Si Vox retrocede, seremos muchos los españoles perjudicados. Es una hora crucial donde todas las energías y toda la valentía son necesarias.

Ayúdemosle. Recordemos a Santiago Abascal sus promesas electorales, para que se reafirme en sus principios y tenga el coraje de decir “no” a quienes pretenden convertirlo en un partido más de lo que él bautizó como “la derecha cobarde”.

Su defensa sin complejos de la vida, la familia y las libertades ha cautivado a muchos decepcionados con un centro-derecha “blandengue” que había asumido los dogmas de la izquierda y del neomarxismo sin pelea ni coraje.

Pero  parece que hay algunos muy interesados en que Vox incumpla su palabra.

El mismo Jiménez Losantos lleva días enviándoles mensajes para que se amolden a los dictados del PP y de Ciudadanos en las negociaciones para la formación de gobiernos regionales y municipales, renunciando a principios, descafeinando su programa, firmando un cheque en blanco a cambio de nada…

Santiago Abascal nos necesita, y tú y yo debemos de recordarle que no se rinda, o de lo contrario este proyecto esperanzador, perderá su sentido y desaparecerá.

Gracias por ayudarlo a mantenerse firme.