El alcalde de Vilassar de Mar no tiene vergüenza ni pudor. 

Te escribo todavía sorprendido por lo que ocurrió este domingo en la playa de Vilassar cuando realizamos una espectacular acción en la que colocamos 300 sombrillas en contra de la ‘yincana sexual’ que tuvo lugar en esta localidad.

Pero déjame que hoy te cuente lo que no se ve en esas imágenes.

Desde las 6 de la mañana, varios voluntarios de HazteOir.org nos juntamos en la playa de Vilassar para realizar esta acción informativa y reivindicativa que ves en las imágenes. A favor de la protección de la infancia y contra la corrupción de menores.

Para cuando llegó la policía ya teníamos puestas las 300 sombrillas y les pudimos explicar nuestra acción y les contamos que esas sombrillas eran un regalo para los bañistas y formaba parte de una campaña.

Como es lógico, a esta pareja de policías todo les pareció correcto, nos felicitaron por la acción y se fueron. Hasta ahí todo normal, pero todo se torció al cabo de una media hora cuando otro grupo de unos 6-7 policías llegó a la playa.

El alcalde, Damià del Clot, de ERC, enterado ya de la acción, nos mandó a este grupo de políticas para intentar amedrentarnos, paralizar la acción e incluso multarnos. 

Alegaban que nuestra campaña podía ofender a los bañistas o molestarles por el color naranja de las sombrillas. Le respondimos que lo que ofende y molesta a las familias es que se corrompa la inocencia de sus hijos con pornografía y prácticas obscenas sin su conocimiento.

También decían que habría quien no querría usar nuestras sombrillas sino las suyas propias, cuando la realidad es que dejamos varios metros de separación entre cada una de ellas, precisamente por anticiparnos a esa posibilidad.

En HazteOir.org estamos acostumbrados a estas amenazas, y a pesar de insistir en que podrían multarnos con hasta 100.000 euros, seguimos adelante con acción con respeto y determinación.

Pero el alcalde no se detuvo ahí. Alguien de su equipo vino hasta la playa para hablar conmigo y distraerme de informar a los bañistas sobre la campaña.

Fingió interesarse mucho en nuestra acción pero lo que en realidad hacía era intentar captar mi atención mientras otras personas retiraban a toda prisa las sombrillas que nosotros habíamos puesto.

Y no solo eso, también grabó toda la conversación con su móvil en un intento de “pillarme” con alguna frase sacada de contexto y luego difundirla por redes sociales.

Actúan como la mafia. Por supuesto no lograron su objetivo y la acción fue un éxito, todos los bañistas nos felicitaron, pero no podemos permitir que un cargo público actúe de semejante manera.

Por eso hoy vamos a colapsar su teléfono con llamadas de protesta contra el alcalde y sus prácticas mafiosas.

Está claro que en el ayuntamiento de Vilassar nos tienen miedo porque hemos respondido con claridad y dureza contra su ‘yincana sexual’ y quieren callarnos antes de que esto tenga consecuencias reales y la Fiscalía del Menor actúe contra ellos.

Es hora de doblar la apuesta y pedir la dimisión del alcalde.

Llama ahora a este teléfono y y pide la dimisión del alcalde de Vilassar del Mar: 937 54 24 00 (el horario de atención es de 9 de la mañana a 2 de la tarde)